Izquierda Unida hace un “llamamiento hacia un Proceso Constituyente” a las fuerzas sociales y políticas de izquierdas para abordarlo “desde abajo, desde la calle, con ambición política y rigor”

Izquierda Unida Federal ha concretado y compartido públicamente su decidido ‘Llamamiento hacia un Proceso Constituyente’ en un multitudinario acto en Madrid, realizado el pasado jueves 17 de julio, encabezado precisamente con este mismo lema. IU expresó su voluntad de impulsarlo “desde abajo, desde la calle”, con “ambición política, pero con rigor y solidez técnica” para lograr “un nuevo modelo de país”. Pero no quiere hacerlo en solitario y, para ello, ha realizado un llamamiento al resto de fuerzas políticas de la izquierda y a los movimientos sociales que quieran “converger y confluir” en este camino, más allá se simples acuerdos electorales.

En el acto en el Círculo de Bellas Artes, ante cerca de 400 personas que han sumado su ‘calor político’ al fuerte calor ambiental de la tarde madrileña, han intervenido el coordinador federal de IU, Cayo Lara; el coordinador de IU-Comunidad de Madrid, Eddy Sánchez; la consejera de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía, Elena Cortés, y el diputado y responsable ejecutivo de Proceso Constituyente, Alberto Garzón, que se encargó de introducir a sus compañero/as y a quien el encuentro le sirvió como “pistoletazo de salida”, según sus propias palabras, para las nuevas responsabilidades de esta secretaría de la que se ocupa desde el pasado 28 de junio.

Garzón ha reivindicado el trabajo realizado por IU desde antes de que estallara la crisis económica de mediados y cómo esta formación ha contribuido a pasar de la “apatía de la sociedad” a participar decididamente en política hasta el momento actual en que una mayoría “demanda cambiar la sociedad”.

Aclaró que Izquierda Unida “no puede hacerlo en solitario”, por lo que “llamamos a cambiar las reglas de juego. Hacemos un llamamiento para construir un nuevo país, para parar los pies a la élite política y económica”.

El diputado por Málaga detalló que esta voluntad transformadora “está en el espíritu de IU” y planteó que “el bloque social y político se hace en la calle, no un mes antes de las elecciones” y para buscar este espacio de encuentro y convergencia “hay que ser inteligentes y audaces, buscando una hegemonía desde abajo” para ayudar a que “no cristalice la sociedad que nos quieren imponer y de la que nos avergonzaríamos para siempre”.

De forma coincidente, Cayo Lara apeló a “buscar las alianzas suficientes para que de verdad podamos llegar a ese bloque que permita un nuevo proceso constituyente” que para en seco la involución neoliberal. Aseguró que esto puede hacerse “sin pérdida de identidades” y manteniendo lo mejor de las aportaciones de cada fuerza que quiera contribuir a ello.

Para el máximo responsable de IU, una nueva Constitución debe incluir con claridad meridiana derechos fundamentales “como la igualdad real entre hombres y mujeres, el derecho al trabajo, a la vivienda, a la educación, la salud” y principios como “la laicidad y un modelo de Estado federal, republicano y solidario”, que esta formación lleva exigiendo desde hace décadas.

Responsabilizó sin rodeos al bipartidismo que conforman PP y PSOE de “no haber permitido” el desarrollo práctico de los principales puntos de la Constitución de 1978 y de “haber roto el pacto constitucional” existente desde entonces con sus políticas de recortes e imposiciones, con el momento culminante de la reforma en 2011 del artículo 135 para poner el pago de la deuda por encima de los derechos sociales.

Llamó a “prepararse para gobernar” porque “si queremos derrotar al PP estamos llamados a gobernar, a pasar de la pancarta al Gobierno” porque es la única forma de que no se “frustre a la gente” que demanda un cambio radical y a quienes hay que ofrecerles un “proyecto serio, hecho con mucha inteligencia”.

Cayo Lara reivindicó al inició de su intervención “la memoria” y a esa “gente que se dejó la piel” que pasó por la cárcel y tuvo que volver del exilio, hasta llegar a un proceso de elaboración de la primera Constitución que “llegó hasta donde pudo llegar” porque “con una correlación de fuerzas diferentes hubiera habido otra Constitución, pero si no fue así no fue por culpa de aquellos que tuvieron que hacer lo que pudieron”.

Y finalizó el acto pidiendo a todos claridad en la explicación a la sociedad de los planteamientos de IU, entre ellos el contenido que encierra el propio proceso constituyente, que tradujo en cuatro palabras: “Pan, techo, trabajo y libertad”.

Antes de Cayo Lara, la consejera andaluza Elena Cortés respaldó la necesidad de convergencia entre las fuerzas de izquierda e hizo una encendida defensa de la participación de las mujeres en este camino de transformación, porque “el  nuevo proceso constituyente, para serlo, o es feminista o no lo será”, dijo entre aplausos.

Eddy Sánchez reclamó a la izquierda que “pase de la retórica a lo concreto”. Coincidió con Garzón que “no hay fuerza que pueda por sí sola” llevar a buen puerto la ingente tarea que hay por adelante y afirmó que “Izquierda Unida piensa en grande” porque en esta formación “caben proyectos y una alternativa de país, porque la que hay ha fracasado”.