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miércoles, 30 de septiembre de 2015

Alberto Garzón: “En Izquierda Unida no nos vamos a sumar a la candidatura de Podemos”. Entrevista al candidato a la presidencia del gobierno de IU.

Cuartopoder.es
En 2011 entró en el Congreso como uno de los diputados más jóvenes. Las esperanzas de una buena parte de IU estaban ya puestas en él. A lo largo de estos años se ha ido convirtiendo en la cara más visible y renovadora de la coalición de izquierdas. Fue la única persona de la formación que consiguió los avales suficientes en las primarias para ser candidato a la presidencia del Gobierno. Ha sido el encargado de defender la estrategia de unidad popular de cara a las próximas elecciones generales. Alguna voces han alertado sobre la posibilidad de que esto conlleve una subordinación a Podemos,  algo que Alberto Garzón (Logroño, 1985) niega pese a la “rumorología” que pretende “dinamitar la confluencia”. Mantiene que la hoja de ruta sigue adelante apostando por un espacio en el que todos los actores se sientan cómodos como ocurrió en los procesos llevados a cabo en las municipales. Recibe a cuartopoder.es en su despacho frente al Congreso, dos días después de las elecciones catalanas.
El lunes dijo que tenía una opinión sobre la campaña de Catalunya Sí que es Pot en las catalanas pero que prefería reservársela hasta que se debata colectivamente. En cualquier caso, ¿qué valoración general hace de las elecciones?
— Las elecciones han sido trascendentales pero también muy particulares. Ha habido un intento de convertirlas en un plebiscito independentista y por tanto los factores que pueden explicar el resultado final son muy complejos. La necesidad de reservarse la opinión personal es fundamentalmente para poder ser rigurosos y tener tiempo suficiente para reflexionar colectivamente y ver en realidad cuáles son los factores que más han afectado al resultado, que ha sido peor que el que teníamos cuando nos presentamos junto con ICV hace tres años, pero no creo que esté marcado por un único factor. Sí que hay uno, y está constatado. La polarización sobre el debate independentista ha llevado directamente a ahogar el debate social más allá del modelo de territorio. Esto lógicamente para una formación que apostaba, en el caso de IU, por el derecho a decidir aparte de la opinión que cada uno tengamos sobre el independentismo, ha tenido una repercusión. Hemos desaparecido durante la campaña en gran medida.
— Dijo también que Podemos ha tenido una visibilidad destacada en la candidatura. Ha llamado mucho la atención que usted y Pablo Iglesias no coincidieran en ningún acto. ¿Hubiera cambiado el resultado una imagen conjunta de ambos?
— Nosotros hemos estado a disposición del comité electoral que estaba formado por todos los partidos que han participado en el proceso. Desde la generosidad y la humildad siempre nos hemos puesto al servicio de la candidatura. Somos partidarios del derecho de autodeterminación de Cataluña y que sean ellos los que decidan su futuro. También los catalanes debían gestionar la campaña. Nosotros simplemente acudimos en función de lo que eran sus requerimientos. En ese ámbito todos los dirigentes de IU hemos actuado en función del comité. Por las razones que fueran decidieron que no era mejor juntarnos a determinados dirigentes de Podemos e IU, como es el caso de Pablo conmigo. Sí que ha habido otras personas de los dos partidos que han compartido escenario, pero es una decisión que respetamos. Al hablar de eso, hice una constatación, ya que la visibilización hacia fuera de Catalunya Sí que es Pot ha sido fundamentalmente Podemos. Es decir, la gente ha entendido que la candidatura era Podemos.
— Entonces ¿no se moja respecto a si hubiera cambiado el resultado?
— Es un futurible. O ni siquiera, es un ejercicio de política ficción. No sé cuál hubiera sido el resultado ni la incidencia que hubiera tenido. Es muy complicado.
— Si IU estuviera en un nuevo gobierno catalán o estatal, ¿qué decisiones tomaría respecto a la cuestión catalana?
— Habría que defender el derecho a decidir y luchar por una consulta con todas las garantías, tanto nacionales como internacionales, que permitan que el pueblo catalán pueda decidir su futuro. Pero, además, el gobierno sería para modificar el ámbito social, revertir los recortes de Convergencia y las políticas que se han hecho. Desgraciadamente parece que CDC va a seguir gobernando. Hacen política neoliberal y es algo absolutamente criticable. En el otro lado hay que entender un mensaje que es que Cataluña no quiere confrontar sino que quiere dialogar. Por tanto, España tiene que dialogar y no confrontar. Desde IU hemos decidido apoyar la consulta en el Congreso en alguna ocasión. Sería simplemente mantener la coherencia en el tiempo.
— Se ha quejado de la espectacularización de la política y del ruido que hay alrededor del asunto de la confluencia para las generales. La realidad es que no hay aspectos demasiado concretos. ¿Es normal no saber qué va a pasar todavía con la candidatura o cómo se va a presentar IU?
— La espectacularización de la política tiene un elemento llamativo y es que pone el foco en cuestiones fundamentalmente superficiales y epidérmicas del ámbito político. No va al debate profundo y reflexivo. Hablar de la confluencia no es espectacularizar la política. Es obvio que hay que hablar de ello y de esas incertidumbres que planteas, pero la cuestión es el enfoque. Decir si lo vamos a hacer desde una perspectiva de si yo y Pablo nos llevamos mal o bien y hablamos todos los días o si, por el contrario, vamos a hablar de si la confluencia es posible en términos programáticos. Por ejemplo, ¿cuáles son las posiciones de Podemos frente a la nacionalización de la banca? ¿Es una obstáculo o una facilidad? Esos debates no están teniendo lugar a pesar de que a mi juicio son los verdaderamente interesantes. Ahora bien, hay que reconocer que toda la cuestión de la confluencia es muy relevante para el país y la izquierda organizada, pero, sin embargo, creo que nos encontramos ante un tratamiento generalmente espectacularizado y que genera mucha frustración. Porque al final no hay contenido y nos mantenemos entre varios titulares muy desconectados de la problemática real de la ciudadanía. Nosotros intentamos avanzar siempre desde un punto de vista programático. La confluencia la queremos hacer con candidaturas rupturistas, es decir, programas que vayan a resolver los problemas de la gente desde posiciones de izquierda. No vale, por ejemplo, una unidad popular con el PSOE, porque son parte del problema.
— Le han hecho la pregunta ya varias veces pero se la vuelvo a repetir. ¿Hay negociaciones, acuerdos o conversaciones abiertas con Podemos más allá de que Iglesias y usted hablan como ya ha señalado alguna vez?
— No hay negociaciones porque eso implicaría que dos direcciones se sentaran a hablar de los términos concretos para un acuerdo electoral. Eso no está encima de la mesa. Lo que hay son conversaciones para ver cómo podemos llegar a facilitar acuerdos lo antes posible para poder comenzar una campaña electoral que está al borde de la esquina. Me preocupan dos cuestiones. La primera, en términos de país, es que la unidad popular es el instrumento para evitar que se consolide el neoliberalismo en España, los recortes y el modelo laboral lesivo para los trabajadores. Para evitar esa consolidación que puede darse en varias formas, como con una coalición PP-PSOE o un bipartidismo sostenido por Ciudadanos. La unidad popular debe servir a la gente trabajadora y sencilla que quiera defender las conquistas sociales. En segundo lugar, es el papel de la izquierda organizada e ideologizada en este país. Hay que evitar que la izquierda se diluya en discursos profundamente superficiales que no vayan al centro de los problemas. Creo en una izquierda marxista, de práxis y de teoría que pueda seguir organizada después de diciembre para influir en la configuración de un nuevo país. Ambos elementos son los que, en torno a la unidad, deben resolverse.
— En la última Presidencia Federal anunció que se presentaría a las primarias de Ahora en Común para elegir candidato a presidente. Ha habido varias noticias relacionadas con AeC durante estos días. Por un lado, el abandono de varios promotores del proyecto denunciando supuestos pactos de despacho. Por otro, un comunicado que también firma IU, donde dicen que quieren “traducir la voluntad que expresó Podemos para sumar a la sociedad civil a sus candidaturas”. Además, integrantes de Equo y Decide en Común han reconocido que la intención es integrarse en la candidatura de Podemos. ¿No ha cambiado algo la situación desde aquella presidencia?
— Para nosotros la estrategia indiscutible aprobada en los órganos es participar en espacios participativos, democráticos, desde abajo, con un programa y donde la gente se encuentre cómoda. Creemos que AeC es ese espacio. Hemos visto su desarrollo, está lleno de independientes y creemos que es un espacio cómodo. Es un camino bastante positivo y no vamos a interrumpirlo. Además es la forma de crear ilusión. Hay que aprender de las experiencias catalanas y sobre todo de las municipales que tuvieron procesos abiertos con mejores resultados. Despiertan un interés mayor. Sólo valoramos la opción de AeC. Es la agenda marcada en IU y no hay otra. ¿Hay problemas dentro? Por la información que tenemos, hemos visto que hay gente que se ha retirado. Pero lo han hecho en virtud de fundamentos que no existen. Decir que nosotros estamos negociando con Podemos y que tenemos pactado ya todo es una falsedad. Y además, cuando uno hace una declaración de esa naturaleza es el que tiene que demostrarlo. Si no, está mintiendo. Y se ha entrado en una rumorología que sirve para justificar cualquier acción a pesar de no poder demostrarlo. No hay negociaciones con Podemos, no hay un acuerdo preestablecido y, por tanto, nuestra participación en AeC sigue siendo igual de generosa que siempre. Que las personas se marchen es respetable, pero creo que se equivocan en las acusaciones. El tiempo lo demostrará. En segundo lugar, hay que dejar muy claro que en IU no nos vamos a sumar a la candidatura de Podemos. Buscamos un espacio de cooperación en el que se respeten las diferentes identidades de las organizaciones, de todas. Y que por lo tanto no sea ir como independientes en las listas de Podemos. Eso es inviable.
— Entonces, ¿descarta ‘incrustarse’ en la listas de Podemos tras las primarias de AeC?
— Lógicamente en una lista de Podemos en donde nosotros acabaríamos yendo como independientes, eso no puede ser posible.
— Pero la opción que maneja Podemos es una candidatura con su nombre y un guión que sume algo más. ¿También se descarta?
— Eso es un futurible. Ahora mismo lo único que establecemos son espacios de cooperación que sean respetuosos. Hemos visto las experiencias de las municipales y la gente se sentía cómoda. Nos parecen modelos razonables. Pero desde luego todo aquello que sea una participación en Podemos no lo vamos a aceptar. Porque nosotros no somos de Podemos. Somos gente de izquierdas que queremos confluir. En ese espacio de confluencia nos sentimos cómodos y no le ponemos pegas a los nombres. Se puede llamar Ahora en Común u otra cosa pero desde luego lo que le tiene que quedar claro a la gente es que, por ejemplo, una reunión como la que mencionabas antes de Madrid se ha interpretado como que ese espacio iba a entrar de forma independiente en las listas de Podemos y es una interpretación profundamente falsa. Nosotros no vamos a participar ahí, en un espacio donde se pretenda insertar individualmente llenando los huecos de Podemos. Buscamos los espacios que permitan multiplicar. Para ello es interesante que la gente reconozca que en una candidatura hay varias almas. Eso pasó en Ahora Madrid, donde había gente de Podemos, IU o Equo que se sentían referenciados. Si sólo hubiera un alma, habría mucha gente carente de esa referencia y no estaríamos consiguiendo optimizar los resultados.
— Por tanto, ¿siguen esperando a convencer a Podemos de que lo mejor es que participen en estos espacios? Su estrategia es distinta, como ya sabe.
— Convencer puede ser una palabra. Lo importante es que esa es nuestra opción. Porque hemos aprendido críticamente, porque hay que recordar que no toda IU hizo lo mismo en las municipales, que debe ser así. Si otras formaciones tienen otra hoja de ruta, está bien. Pero vamos a colaborar y cooperar a ver si podemos encontrarnos sobre todo pensando en el país y no en nuestros ombligos. Quiero hacer un llamamiento, no hay que pensar en nuestros ombligos como organizaciones sino en la gente que necesita un espacio de confluencia y colaboración. Creo que no debería haber obstáculos para trabajar conjuntamente. Nuestra hoja de ruta no se ha movido desde el día después de las elecciones municipales.
— En su partido hay algún sector que pese a sus palabras sigue teniendo inquietud. Como Izquierda Abierta, que además ha puesto en marcha otras iniciativas. ¿Entiende estas inquietudes al no saberse aún cómo se va a presentar IU a las elecciones?
— Puedo entender todas las inquietudes porque son tiempos de turbulencias y donde el suelo se mueve bajo nuestros pies. Estamos en una incertidumbre permanente, con un escenario volátil a más no poder. Es lógico que haya incertidumbres. Lo que no cabe es aprovecharlas para meter una estrategia partidista. Nuestra hoja de ruta es clarísima, hemos sido transparentes. He aceptado con toda generosidad como candidato de IU presentarme a nuevas primarias para sumar con más gente. Todo ha quedado claro. Los rumores tienen que ver con estrategias para dinamitar un proceso de confluencia que fuera sano. Y luego hay que definir la unidad. IzAb sabe y conoce nuestra hoja de ruta porque ha estado en los órganos aunque no haya votado a favor. Si ellos deciden participar en otros escenarios que tienden a pactar con la socialdemocracia del PSOE, pues no lo compartimos a nivel de IU. Es respetable y somos una organización plural pero eso no es la hoja de ruta de IU.
— En octubre del pasado año, en la última entrevista con este medio, señaló que IU era un instrumento más útil que Podemos. ¿Lo sigue pensando?
— Es evidente que lo pienso. Elegí IU y más concretamente el PCE. Me identifico como comunista, no huyo de esa etiqueta. De hecho hay que reivindicarla como un modelo de sociedad que defienda la democracia económica o la sanidad y educación pública. Una izquierda que no aspire sólo a que los alcaldes y diputados cobren menos y sean más austeros, que por supuesto me parece muy bien. Somos gente que ha predicado con el ejemplo. Nada más llegar al Congreso retiramos los planes de pensiones privados. Pero queremos representantes políticos que hablen de los conflictos en el ámbito económico. Que hablen de los salarios, de la desigualdad, de la pobreza y de soluciones para enfrentarla. Y creo que esas soluciones sólo pueden ser desde una izquierda radical en el sentido literal del término. Por eso pertenezco a este espectro ideológico. Y sin ningún temor, con mucho orgullo.
Mi instrumento preferido es aquel que entienda que las elecciones son un mecanismo para poder transformar la sociedad, pero que hay que hacerlo en otros dos espacios fundamentales: la calle y el ámbito cultural. La sociedad no se cambia sólo haciendo nuevas leyes sino pedagogía para que nuestra concepción del mundo sea mayoritaria en el sentido común de la gente en un tiempo posterior. Estas tareas sólo las hacen las organizaciones que tengan claro que no son sólo una maquinaria electoral. Una formación como IU, con sus defectos, es la mejor para transformar la sociedad en estos momentos. Y muy particularmente el PCE, con todos los procesos de renovación que hemos hecho y tendremos que seguir haciendo. El resto de partidos pueden tener mucho en común pero no son el instrumento que desde mi posición concreta considero más útiles.
— Sobre Grecia, han mantenido una posición crítica con Tsipras ¿Cómo debe gestionar Syriza su relación con la UE?
— Tenemos que asumir que la UE firmó el principio de su fin en el ámbito económico permitiendo que el Eurogrupo chantajeara con actitudes mafiosas y extorsión a un país y un Gobierno que estaba representando a un pueblo que luchaba. Eso ha significado la gota que colma el vaso dentro de los errores de la UE en al ámbito económico que se suman a otros políticos y sociales como tratar a los refugiados como si fueran mera mercancía que se subasta. Esa UE es un fracaso para la gente sencilla y los trabajadores de los países. Esta UE tiene que acabarse y construir otra. Concretamente en Grecia significa que hay que trabajar en espacios de integración regional de solidaridad. Hay que conseguir que haya gobiernos en el Sur de Europa que compartan la reconstrucción a través de otros principios. El gobierno de Tsipras tendría que trabajar para que el tercer rescate no se puede llevar a cabo, porque es un ataque a la línea de flotación del estado social griego. Tendrían que trabajar en un verdadero programa de salvamento de la gente que tenga una orientación distinta. El propósito de este nuevo Gobierno es negociar un programa de cambio radical que permita a la economía resucitar.
— ¿Y sobre el euro? Anguita dijo al lado de usted en la fiesta del PCE que hay que trabajar por salir de la moneda única. ¿Lo comparte?
— Quizás como economista lo tengo un poco más claro. Por eso creo que el debate no puede situarse en torno al euro sí o no. Es un debate de orientación populista porque el euro es un elemento material que la gente visualiza y lo puede convertir en un blanco fácil de ataques. Pero no es riguroso. Los problemas de los países de Europa no son la moneda, son sus estructuras productivas. Las del Sur están muy subdesarrolladas respecto a las del Norte. Países como Grecia, Portugal o España tenemos estructuras basadas en el bajo valor añadido. Mientras que Alemania la tiene en el alto valor añadido. Dicho de otra forma, exportar productos de alto valor añadido te permite tener condiciones salariales mucho más óptimas, desarrollar el estado social y tener un espacio para una suerte de socialdemocracia al modelo escandinavo. En cambio si es lo contrario, estás condenado a la precariedad y a vivir de sectores estacionales como el turismo. Es el verdadero drama junto con la falta de soberanía. Pero recuperar la moneda no es recuperar la soberanía. Es sencillamente tener capacidad para decidir el futuro.
Si te sales del euro seguirías teniendo los mismos problemas. En primer lugar, que no tienes nada que vender porque no tienes estructura productiva desarrollada y, en segundo, porque el poder privado lo seguirá siendo por mucho que utilices una neopeseta. El Reino Unido ha sido un país que ha sufrido políticas neoliberales y recortes. Y no tiene euro. La gente trabajadora de allí sufre las mismas consecuencias. Y cuando nosotros teníamos la peseta, no teníamos soberanía. Por tanto, simplificar el debate sobre el euro es un drama porque agitas un enemigo común pero la realidad es más compleja. Entrar en el euro fue un error, una política para consolidar el neoliberalismo en la UE. Pero la salida no te garantiza una solución. Y tiene riesgos. Si la izquierda es la que abandera la salida del euro, los desastres consecuentes serán achacados a la izquierda. Entonces se habrá abierto una alameda estupenda para que la extrema derecha tome el control del momento.
— En Alcorcón señaló que el PP y el PSOE están preparando una reforma de la Constitución. ¿Son sensaciones, suposiciones o tienen constancia de ello?
— Hay dos elementos. Uno que es de intuición en estos momentos con un conflicto como el catalán que requiere de una reforma. Y un elemento de voxpopuli que el PP y el PSOE, junto con una regeneración como Ciudadanos, están trabajando en una segunda transición que apuntale a Felipe VI, a la monarquía, y que permita que las niñas puedan reinar. Y que al mismo tiempo sea un retroceso social en la legislación del derecho del trabajo. Con un sistema como el nuestro es muy complicado que dentro de varios años sigan existiendo siete partidos con representación. Van hacia una reforma electoral dentro de la Constitución de 1978 como la que presentaron sobre los alcaldes y que puede hacerse extensible. Después pueden convocar un proceso constituyente para una nueva redacción de la Constitución mediante la aplicación de esa ley electoral más regresiva y que lógicamente condenaría a la izquierda a un lugar hostil dado que en un reforma así a las terceras fuerzas les mete en una tendencia que no es nueva. Italia lo ha vivido, la izquierda ha ido desapareciendo aplastada por las reformas electorales. Ese el modelo que sigue el sistema y es un motivo más para entender que haya una candidatura unitaria en estos momentos. Para cortocircuitar esta operación. Aquellos que no quieran participar de una candidatura unitaria serán cómplices de una operación del sistema en los próximos años.


martes, 29 de septiembre de 2015

Izquierda Unida llama a la movilización social,- marchas de la dignidad, contra la violencia machista y en favor de la paz contra las bases militares yanquis- para construir un nuevo país

El Coordinador general de Izquierda Unida de Andalucía (IULV-CA), Antonio Maíllo hizo un llamamiento ayer, martes 29 de septiembre, a “un otoño de movilización social” situando “tres fechas fundamentales”: la movilización general de la Marcha de la Dignidad convocada para el 22 de octubre, la Marcha a Madrid contra las violencias machistas convocada por el movimiento feminista del 7 de noviembre y la Marcha contra la Base de Morón del 21 de noviembre.
Maíllo, que ha realizado estas declaraciones durante su visita al IES Universidad Laboral de Málaga, en la que estuvo acompañado de los concejales de IU-Málaga para la Gente, Eduardo Zorrilla y Remedios Ramos y el Coordinador Local, Paco Guzmán, vincula la movilización del 22-O a “la recuperación de derechos, la denuncia del modelo neoliberal que nos destroza como sociedad y que está desmantelando los derechos laborales”. “Es una prioridad de IU la toma de conciencia sobre la necesidad de la movilización para construir un nuevo país y unas nuevas políticas”, ha recalcado el Coordinador andaluz.
Sobre la Marcha a Madrid contra las violencias machistas del 7 de noviembre, Maíllo destacó que tiene que servir para reivindicar una “sociedad de igualdad entre mujeres y hombres”. En este sentido Maíllo anunció que esta movilización irá acompañada de propuestas legislativas y otras iniciativas de los grupos institucionales de IU.
Una de estas iniciativas fue presentada en la misma comparecencia ante los medios, por la concejala de IU en el Ayuntamiento de Málaga, Remedios Ramos. Se trata de una moción de apoyo a la movilización, en la que se propone la declaración de Málaga como “zona libre de violencia de género”.
Por último, el Coordinador andaluz, llamó a participar en la Marcha contra la Base de Morón del próximo 21 de noviembre. Para Maíllo, esta edición de la Marcha adquiere “relevancia especial” por las maniobras de la OTAN, “las mayores de su historia”, que tendrán lugar a finales de octubre, realizando una parte importante de las mismas en Andalucía, concretamente en Cádiz y Almería, y por el nuevo papel de la Base de Morón como sede del AFRICOM (Comando del Ejército de EEUU para África).

Maíllo recordó que en estas maniobras, llamadas Trident Juncture, participan más de 35 mil militares, denunciando que su celebración “viola el acuerdo del referéndum de la OTAN de 1986” y que la instalación del AFRICOM en Morón provoca que Andalucía esté “en la diana del terrorismo internacional” y que “en vez de ser la base humanitaria que querríamos” será “la base de agresión de EEUU en África y Oriente Próximo”.

sábado, 26 de septiembre de 2015

Marxismo y filosofía de la praxis en Adolfo Sánchez Vázquez. En el centenario de su natalicio

Eddy Sánchez Iglesias
Fundación de Investigaciones Marxistas
Uno de los momentos más importantes en la pasada edición de la Fiesta del PCE, fue la celebración, el sábado 19 de septiembre, del centenario del nacimiento de Adolfo Sánchez Vázquez, uno de los filósofos más importantes de las últimas décadas. Durante esos días la Fundación de Investigaciones Marxistas (FIM) difundió un importante número de vídeos y escritos del filósofo y marxista andaluz, entre ellos material inédito, como la edición de su última conferencia realizada en España en 2002.
El inicio precoz en la política, a través de la militancia desde los 15 años en la Juventud Comunista en Málaga, es uno de los elementos que diferencian a Sánchez Vázquez de otros filósofos, los cuales llegaron al marxismo tras un largo y, muchas veces conflictivo, trayecto personal. Este pronto compromiso político del filósofo nacido en Algeciras tuvo que ver con el impacto y fuerte adhesión que provocó el proyecto republicano entre la juventud estudiantil de la época, que generó un clima de efervescencia política al que no fue ajeno Sánchez Vázquez.
La militancia política y el marco social impulsado desde la II República, le permitieron tomar contacto con la realidad en la que vivían los obreros y campesinos malagueños de aquellos años, experiencia que según reconoció el propio filósofo años después, le permitió generar una concepción de que el ser humano es “lo que produce y lo que hace”, núcleo central de la concepción de filosofía de la praxis que desarrolló Sánchez Vázquez años después.
Una vez finalizados sus estudios de bachillerato, y ya influido por la dura realidad social en la que vivían los trabajadores, Adolfo Sánchez Vázquez inicia sus estudios universitarios en la Universidad Central de Madrid, que le permiten al joven filósofo tomar contacto con el ambiente cultural predominante en la II República.
Desde el inicio de su experiencia universitaria, Sánchez Vázquez detectó la contradicción existente en el hecho de un poderoso movimiento obrero, que “no dejaba huella” en una presencia marxista dentro de los círculos universitarios e intelectuales republicanos. La hegemonía que ejercía el pensamiento krausista dentro del principal partido obrero de la época como era el PSOE, es sin duda una de las explicaciones a tal contradicción. El pensamiento krausista se difunde en el socialismo español de la mano de grandes intelectuales republicanos como Giner de los Ríos, que encuentra en Julián Besteiro y Fernando de los Ríos Urruti, sus máximos continuadores. El krausismo se convierte en la expresión teórica de la política reformista del PSOE, que fundamentalmente, negaba la dialéctica revolucionaria de la lucha de clases.
Por otro lado, la otra gran corriente de pensamiento dominante en aquellos años giraba en torno a la figura de José Ortega y Gasset, que desde un liberalismo elitista, relacionaba la tarea “de la renovación de España” europeizándola, tomando la filosofía alemana, principalmente de Heidegger, como base teórica para el desarrollo de dicha tarea. Predominio de la filosofía alemana que para Ortega y Gasset, jamás incluyó a Marx.
No existía, por tanto, una filosofía conectada con las necesidades sociales y políticas de la España de la época, pensamiento filosófico dominado por influencias extranjeras y carentes de un verdadero pensamiento de base nacional y popular. Situación que sirve de base para la llegada de Adolfo Sánchez Vázquez al marxismo.
Esta recepción del marxismo por parte de Adolfo Sánchez Vázquez, está influida por la derrota sufrida en la Guerra Civil y el ascenso al poder del fascismo en España. Es desde esta dolorosa realidad desde la que se explica la fuerte relación que Sánchez Vázquez entabla con la figura y el pensamiento de Antonio Gramsci.
Es sobre estas bases sobre las que se puede comprender el sentido, que para Sánchez Vázquez, tiene la filosofía.
En primer lugar, la filosofía del pensador hispano-mexicano, trata de fundamentar teóricamente la práctica política, es decir, desarrollar un acercamiento a la filosofía desde lo real. Se trata por tanto, no tanto buscar respuestas teóricas a cuestiones teóricas, como hallar respuestas teóricas a cuestiones prácticas.
Punto de partida que conduce, en segundo lugar, a entender el concepto de filosofía de la praxis de Adolfo Sánchez Vázquez desde la afirmación realizada por Gramsci, donde “un hombre político escribe de filosofía; pero puede ocurrir que su verdadera filosofía haya que buscarla, sin embargo, en sus escritos de política”.
Sirvan estas palabras de homenaje al que es sin duda, uno de los más grandes filósofos de las últimas décadas, verdadero hombre clave en la cultura latinoamericana contemporánea, que por desgracia, es prácticamente desconocido en nuestro país, y lo que es peor, en el propio PCE.
Más información sobre Adolfo Sánchez Vázquez:

lunes, 21 de septiembre de 2015

“Unidad para la igualdad”, lema de la III Asamblea Federal del Movimiento Democrático de Mujeres que debatió desde el feminismo el impulso de las movilizaciones y la unidad popular

El pasado sábado 19 de septiembre tuvo lugar, en San Fernando de Henares (Madrid), y bajo el lema “Unidad para la Igualdad”, la III Asamblea Federal del Movimiento Democrático de Mujeres (MDM).  Las representantes de las diferentes federaciones del MDM -Andalucía, Madrid, Cataluña, Navarra, Murcia, Castilla y León, Castilla la Mancha, Cantabria- centraron el debate en cuatro ejes de trabajo: la Unidad Popular, las Marchas del #7N, la Defensa del Trabajo Digno y la Campaña en Defensa de los Servicios Públicos.
La  meta de conseguir una sociedad igualitaria y libre de violencias hacia las mujeres hace necesaria la unidad de las mujeres,  y convertirnos así en eje vertebrador de las movilizaciones, de la transformación de un sistema que nos asesina. Es urgente la ruptura de este sistema capitalista patriarcal para que las mujeres podamos vivir con Justicia Social y Dignidad. Porque hemos de tener bien claro que sin la práctica y sin la teoría feminista no habrá emancipación.
Dado el momento preelectoral que estamos viviendo, desde el MDM reflexionamos sobre la necesidad de exigir que los diferentes grupos políticos defiendan una sociedad feminista, una sociedad donde las mujeres no sean tuteladas, no sean ciudadanas de segunda categoría. Ante nosotras se abre la oportunidad de convencer a más de la mitad de la población, a las mujeres, de la importancia de votar opciones políticas que enarbolan políticas de igualdad; que luchan contra la erradicación de las violencias contra las mujeres, y que defienden los Servicios Públicos y el trabajo digno.
Las compañeras Sandra Benfica, del MDM de Portugal y Pau, del Partido Feminista, nos acompañaron en el debate e incidieron en el objetivo común de las organizaciones feministas de transformar la realidad para conseguir la igualdad y una vida plena de las mujeres, de ahí que tengamos que llenar las urnas de indignación feminista para obtener el anhelado cambio.

En definitiva, tal y como señaló la compañera Julia Hidalgo, a la sazón presidenta del MDM, “el Movimiento Democrático de Mujeres tiene la firme voluntad feminista de seguir, porque somos optimistas. La democracia está coja. Adelante. No es fácil, no lo ha sido ni será, pero estamos empeñadas y con unidad seguiremos”.

domingo, 20 de septiembre de 2015

Centella defiende la movilización y la unidad popular basada en un programa de ruptura como alternativa. Fiesta del PCE

Intervención de José Luis Centella, Secretario General del PCE, en el mitin central de la Fiesta PCE 2015           
Vivimos un tiempo en el que el imperialismo, nos muestra la cara más salvaje y agresiva que ha conocido la historia. Con la intención de apoderarse de los recursos naturales e imponer “su” orden mundial llevan la destrucción y la muerte a todos los rincones del planeta. EE.UU. y su fiel aliado, la UE, con la OTAN de brazo armado, participan en guerras abiertas o financian a oscuras tramas “terroristas” poniendo así los intereses militares y económicos por encima de los Derechos Humanos.
El caso de Oriente Próximo y los países del Magreb y Afganistán es un ejemplo brutal. Nos dijeron que los aviones y las armas de la OTAN, les traerían la libertad pero lo que hay hoy en países como Libia, Siria, Afganistán, Irak o Yemen es muerte y destrucción. No hay más democracia ni más libertad, eso sí, el petróleo está en manos de empresas de los EE.UU.
En nombre de la lucha contra el “terrorismo” se venden armas al Egipto gobernado por los militares y a otros estados autoritarios, a la vez que atacan a sociedades civiles laicas, pacíficas, a periodistas e intelectuales en Arabia Saudí y Bahréin o el terrible caso de Siria donde se condena a El Assad mientras se apoya a los tiranos de los países del Golfo, promotores del yihadismo y el integrismo o a Erdogán, que masacra al pueblo kurdo.
Quince años de guerra contra lo que llamaron “terrorismo global” se han saldado con un desastre total, tanto en Siria, como en Irak o Yemen o Libia o Nigeria se está produciendo un enorme desastre humanitario, que ha convertido al Mediterráneo en un inmenso cementerio donde yacen los y las huidas de estas atrocidades intentando entrar en la Europa fortaleza, donde les espera el hambre y la miseria.
Y lo peor hoy hay más terrorismo e inseguridad en todo el planeta que nunca, los atentados del Estado Islámico en Túnez, Arabia Saudí o Irak señalan este fracaso.
Ellos crearon la Yihad lejos de sus territorios, pero nunca se han podido o no han querido controlar esas fuerzas artificiales que se acaban volviendo contra su creador.
En un momento tan convulso los sionistas intentan acabar con Palestina e intentan por todos los medios que no se hable de los muertos, de la represión diaria, del intento de aniquilar a todo un pueblo milenario. Utilizan todos los medios para que nadie hable de Palestina, y menos de su constitución como nación, mientras la ONU calla. Es por esto que en esta Fiesta del PCE vamos a gritar todos una vez más que Palestina es una nación, que el sionismo es una amenaza no sólo para el pueblo Palestino sino para la humanidad y que queremos tribunales internacionales que juzguen los crímenes cometidos.
En ese escenario es más importante que nunca apoyar al Pueblo Saharaui en su lucha por ser una nación. Ante tanta masacre Marruecos se aprovecha para difuminar la causa del pueblo y del Frente Polisario y seguir apoderándose de su riqueza y reprimiendo a sus gentes. El PCE apoya y apoyará la celebración del Referéndum por la autodeterminación del Sahara y estará con el Frente Polisario en todas sus luchas, denunciando la hipocresía de quienes lavan la cara al régimen de Marruecos.

Solidaridad con el pueblo griego y por un frente de países del sur de Europa que haga frente a las políticas de recortes y austeridad de la UE
Pero no sólo suenan tambores de guerra en la otra orilla del Mediterráneo. El caso de Ucrania es también una prueba del enorme desprecio del imperialismo hacia las libertades, la democracia y la vida. Potenciando la imposibilidad de llegar a un acuerdo entre las partes en la región, matando de hambre a los que defienden la posibilidad de autodeterminarse y decidir sobre su futuro, en un país lleno de fascistas que prohíben los partidos comunistas mientras jalean a los nazis. La UE o mira para otro lado o apoya al golpista Poroshenko en sus desmanes en el país. Para la UE los ucranianos solo son 47 millones de consumidores potenciales, sólo quieren pactos económicos para poder vender ahí sus productos. Los miles de muertos en este conflicto les dan igual.
Si quedaban dudas acerca de la UE, la actuación de ésta, especialmente en los últimos años, tanto en su propia periferia occidental y meridional (Chipre, España, Grecia, Italia, Irlanda, Portugal) como en Ucrania, despeja definitivamente el supuesto carácter amable de las instituciones de la Unión que se convierte en una fuerza al servicio de los intereses del núcleo capitalista, arruinando poblaciones, torciendo las voluntades democráticas y desestabilizando económica y políticamente todo país en el que atisbe cualquier resistencia.
El acuerdo impuesto a Grecia es un buen ejemplo, ataca otra vez a la economía y al pueblo griego con la continuación de las políticas de austericidio y la renuncia, por tanto, a ser un estado soberano. Y con todo, de forma terriblemente paradójica, la cuestión es que, a partir de la aplicación del propio contenido del acuerdo, la deuda griega aumentará, la situación económica del país seguirá empeorando y el discurso oficial de la “salvación” del euro que el ministro De Guindos ha enunciado se denota claramente falaz, dada la posibilidad de que la situación límite de Grecia se reproduzca en otros países del sur de Europa.
La soberanía griega ya no existe. Se cierran los bancos griegos durante semanas, se pone la pistola sobre la cabeza de los griegos para imponerles un dictado humillante y Europa pisotea su primer principio de igualdad y ancla un nuevo concepto en los cimientos de Europa: un Estado miembro puede ser aplastado si no marcha al son de la política del rigor monetario. Atenas está bajo tutela. El Gobierno debe recibir luz verde por parte del FMI, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo - la Troika - antes de presentar al Parlamento cualquier proyecto de ley o antes de consultar a la sociedad civil. Está escrito en las conclusiones finales del Dictado de Bruselas.
Esto conduce a la necesidad de avanzar hacia la consecución de una amplia alianza europea que confronte de forma unitaria contra una Unión Europea que ha quedado en evidencia. Las fuertes movilizaciones que se han conseguido en muchos puntos de Europa, movilizaciones que hacía muchos años que no se daban, y en la que mucha gente ha participado, no sólo por solidaridad sino por ver el peligro para sus propios países, demuestran que este espíritu empieza a calar. Hoy como ayer, proclamamos nuestra solidaridad con el pueblo griego y la necesidad de un frente de países del sur de Europa que haga frente a la política de recortes y austeridad que tratan de imponernos.

Estamos sin complejos ni medias palabras con Maduro, con Correa, con Morales, de forma incondicional
América Latina y el Caribe resisten, celebramos como nuestro el triunfo de la Revolución Cubana, la liberación de los 5 y la aceptación de EE.UU. de que no pueden acabar por la fuerza con la Cuba de Raúl y de Fidel, el año pasado recibíamos en esta Fiesta a Fernando González le dábamos el calor y el cariño, reafirmábamos nuestro compromiso con la lucha por la liberación de los cinco, hoy podemos gritar, lo hemos conseguido, ya están con nosotros, ya están libres Gerardo, Ramón, Antonio, Fernando y René, pero no nos engañemos, se ha ganado una batalla, pero el capitalismo no ha desistido de su objetivo, sino que ha reconocido su impotencia y ha cambiado de táctica.
Han pasado del ataque directo a Cuba a una táctica de aplicar lo que podemos llamar golpes de estado blandos que les ha funcionado en Honduras y Paraguay.
Ahora centran sus ataques en Argentina, Brasil, Ecuador y sobre todo en Venezuela. Medios de comunicación en pie de guerra, mintiendo, provocando, jaleando a neo fascistas y oligarcas.
Si consiguen que Brasil, Argentina o Venezuela caigan, el impacto será brutal para la izquierda latinoamericana y mundial. Su lucha es nuestra lucha, no es por solidaridad es también porque cuando criticamos la construcción de la UE podemos poner el contraejemplo del ALBA, UNASUR, MERCOSUR e incluso de la CELAC, construcciones territoriales de la Patria Grande que soñaba Bolívar que tienen como eje al ser humano, no al dinero.
Por esto estamos sin complejos ni medias palabras con Maduro, con Correa, con Morales, de forma incondicional, sin vergonzosos tacticismos.
Por la memoria de Chávez, el Comandante que vio de una forma preclara por dónde pasaba el futuro de América Latina en su camino hacia el socialismo en este siglo XXI. No podemos dejar que nada empañe su legado, caminaremos hacia un trabajo internacionalista, buscaremos marcos donde poder dialogar y preparar un futuro para la izquierda mundial, con los legados de Fidel y de Chávez, del Che, de Sandino, de Allende, por eso vamos a dar todo el apoyo al pueblo Venezolano en las próximas elecciones, en los tiempos fáciles y en los difíciles como el actual, los comunistas españoles siempre estaremos con nuestros amigos, con nuestros camaradas de América Latina.
Algunos nos dicen que esto quita votos, que nos perjudica. Desde aquí les respondemos que antes que todos los votos del mundo está la solidaridad internacional y la lucha contra el imperialismo, por eso vamos a llevar al último rincón de España lo que realmente está pasando en Venezuela, nuestra solidaridad con las víctimas de la ..... demostrando que los terroristas, los vende patrias son los Capriles y quienes llevan la violencia a las calles de Caracas.

No puede haber paz social mientras exista la injusticia
En España, estos días estamos discutiendo los Presupuestos Generales del Estado, el Gobierno ha decidido adelantar su debate al verano, en una intención de convencer a la gente de que las cosas van bien, de que estamos en la línea de la recuperación económica, ha decidido transformar el Congreso de los Diputados en el salón de actos de la campaña electoral del Partido Popular, algo mas ha decidido poner el Congreso y el Senado al servicio del comité electoral del Partido Popular, pero la realidad por muchos mítines electorales que el Ministro Montoro o el Presidente Rajoy den en el Congreso es diferente, la realidad es la de los millones de personas sin trabajo, la de las familias que no tienen ningún tipo de ingresos, la de quienes son desahuciados, de quienes este verano no han podido dar de comer a sus hijos o no pueden pagar ni la luz ni el agua, la realidad es la de los millones de seres humanos que es España están siendo afectados por una crisis que ha provocado el gran capital y que está pagando la mayoría trabajadora.
Por ello tenemos que mantener lo que hemos dicho una y mil veces, no puede haber paz social mientras exista la injusticia de una crisis que como gran estafa está siendo aprovechada por el capital para aumentar sus beneficios, por eso en este momento la movilización, la lucha laboral es la tarea fundamental de nuestro partido, hacer frente en la calle, en las empresas, en la universidad a los recortes sociales, a las medidas autoritarias, a la represión que están sufriendo quienes se rebelan, quienes dan la cara frente a las agresiones del capital, nuestra sitio esta con las trabajadoras y trabajadores de Coca-Cola que están asistiendo a la vergüenza de que una multinacional se resiste a cumplir la ley, con quienes desde Movistar defienden la dignidad del derecho a trabajar en unas mínimas condiciones de decencia, con quienes han recibido miles de multas por protestar, quienes ya están siendo afectadas por la ley mordaza, ese tiene que ser nuestro sitio, con la mujeres que resisten las agresiones de un Partido Popular decidido a fortalecer el Patriarcado, aun a costa de ver como la violencia machista se convierte en el terrorismo más activo de nuestro tiempo.
Como tiene que ser, nuestro sitio está en volcarnos en la preparación de la movilización convocada por las marchas de la dignidad para el mes de octubre, como vamos a estar en las movilizaciones que se han convocado por el movimiento feminista en el mes de noviembre, y como vamos a estar en todas las movilizaciones y lucha que convoquen los sindicatos en defensa de los intereses de los trabajadores que siguen soportando la peor crisis de nuestra historia.
Son tiempos por tanto de lucha en la calle, pero también son momentos de construir una alternativa que basada en la Unidad Popular más amplia pueda ser una alternativa real al sistema, y hacerlo en un momento en el que el poder real, el que trata de dominar la económica y la política, por encima de los gobiernos de turno es consciente en estos momentos de que el régimen que se constituyó en la transición y que ha permitido en estos cuarenta años el desarrollo de un capitalismo especulativo y dependiente en España, no se sostiene por más tiempo.
Una salida de la crisis en beneficio de una minoría privilegiada, no será completa ni tendrá estabilidad si no se consolidan los cambios sociales y políticos que desde 2010 han ido incluyendo en la legislación, primero Zapatero y luego Rajoy, para ello tienen que dar carácter constitucional a las modificaciones de las relaciones sociales, laborales y personales de la sociedad española: reformas laborales, reforma del artículo 135, a los cambios autoritarios y represivos en el código penal, a los retrocesos en derechos de la mujer, eliminación de derechos sociales. El capital necesita la consolidación de un modelo económico ultraliberal, y plena supeditación a la OTAN en política exterior.

Por un proceso constituyente abierto al pueblo
Al mismo tiempo el mapa de partidos que se diseño en 1977, para arrinconar al Partido Comunista de España, otorgando el papel de bisagra a los partidos representantes de las burguesías nacionalistas vasca y catalana porque eran los complementos necesarios para una estabilidad económica y política también está agotado, con un PP corrompido hasta la médula que necesita un recambio en la derecha, y un PSOE desconcertado que necesita un recambio en el campo socialdemócrata. Al mismo tiempo, la deriva independentista del nacionalismo catalán, que había jugado en otros tiempos un magnifico complemento, (no olvidemos cuando Felipe González se negó al acuerdo con la IU de Julio Anguita y se decidió por un acuerdo parlamentario con la CiU de Jordi Pujol), imposibilita a CiU para jugar ningún papel de bisagra.
Además, la realidad de la Unión Europea, demuestra cada vez con más claridad que la democracia tal y como se ha conocido en la Europa del Siglo XX y principios del XXI es incompatible con la salida de la crisis que necesita el Capital con la Banca, y las grandes empresas del Ibex a la cabeza para mantener su dominio sobre la economía, la política y la vida de la gente.
Hoy es más evidente que nunca que capitalismo y democracia son incompatibles, por ello en este momento las fuerzas del sistema necesitan crear en España un nuevo marco institucional que cierre el agotado ciclo del régimen de la transición de 1978-82 y abra un nuevo periodo de "estabilidad" política y social que permita al capital mantener su dominio, recuperando y ampliando su tasa de beneficio.
Se trata de crear un nuevo marco institucional que dé soporte a la nueva realidad y permita asegurar estabilidad social y política del capitalismo español para las próximas décadas, lo que se ha venido a llamar una nueva transición, un nuevo sistema de partidos que, con la monarquía como piedra de bóveda del equilibro, permita al sistema superar el descrédito y desapego social que la degradación moral y social de los partidos del sistema han creado en la mayoría social trabajadora.
Para todo denunciamos que se quiere llevar a España a un sistema más autoritario, verdaderamente represivo, mas antisocial, sustentado en un patriarcado rancio culminando una reforma de la Constitución y eliminando o reducción al máximo la posibilidad de existencia de una fuerza organizada que plantee una alternativa real al sistema, que plantee desde una importante base social y electoral la posibilidad de avanzar hacia cambios reales que abran camino a una salida social, democrática e igualitaria de la crisis.
Denunciamos que el sistema está tratando de ofrecer un nuevo Pacto Constitucional a quienes quieran jugar dentro de las reglas del sistema para mantener el actual sistema de dominio y excluir de todas las formas posibles a quienes planteen una alternativa real.
Por ello Rajoy plantea abrir el debate sobre la modificación de la Constitución adelantando la propuesta de una nueva redacción del Título VIII, el que regula el Modelo de Estado. Una reforma que bajo la excusa de definir más claramente las competencias de cada estamento nos llevaría a un Estado más centralista y cerraría el paso a cualquier posibilidad de ejercer el derecho a la autodeterminación por los pueblos del Estado Español y que evitaría la construcción de un Estado Plurinacional, Multicultural y Multilinguistico.
Reforma Constitucional que eliminaría los pocos restos de elementos sociales que quedan en la actual Constitución. Ni siquiera de forma testimonial se recogerían los derechos al trabajo, a la vivienda, a la sanidad y que tendrá un complemento fundamental sin duda en una nueva ley electoral que permitirá tener mayoría absoluta a un Partido solamente con el 35% de los votos.
De esta forma el Poder pretende cerrar un proceso de cambio de la Constitución limitando la discusión en el parlamento y acortando los debates a los temas preacordados por las fuerzas que acepten implicarse en el Pacto Constitucional. El objetivo es evitar que la presión social que exige cambios profundos en el sistema político los desborde mediante un verdadero proceso constituyente abierto al pueblo, y que pueda poner en cuestión los pilares básicos del sistema: la propiedad, la monarquía y los valores ideológicos patriarcales y reaccionarios, para ello necesitan de un amplio consenso político y una cierta paz social.
No es extraño que la propuesta del Presidente Rajoy se formule después de una entrevista con Felipe VI. Se podría pensar que sea una imposición del monarca, como un paso más del plan “renove” del sistema monárquico, que necesita un nuevo marco que consolide su reinado como máxima expresión del nuevo sistema social, económico y político, repitiendo con demasiadas similitudes los pasos dados en el ciclo 77-82, por lo que necesita también similitud de actores, también en la izquierda, que legitimen social y políticamente este proceso.
Desde este análisis nos sumaremos a todas las iniciativas que signifiquen una respuesta unitaria de las fuerzas sociales, políticas, sindicales y ciudadanas que planteamos superar el agotado régimen del 78-82 porque nos viene muy corto, como paso previo para construir un nuevo modelo de Estado y de Sociedad más justo e igualitario, democrático y social, en el que los pueblos puedan tener el derecho a definir su futuro en libertad, en una realidad institucional que entregue el poder real a la ciudadanía, que permita una economía democrática y social, en un proceso constituyente abierto a la participación popular.
Somos conscientes de que sólo desde una amplia alianza social, política y electoral se puede frenar este intento de nueva transición y se demuestra también que en diciembre no nos jugamos solamente una legislatura, sino el futuro de varias décadas.
Quien no entienda esta cuestión se convierte en un cómplice pasivo de la operación “renove” del bipartidismo monárquico. Tenemos el reto de evitar que se consigan los dos tercios en la configuración del próximo congreso de los diputados y plantear que es posible un nuevo orden social e institucional que permita una salida justa, democrática de la crisis
Estos son los retos que tenemos que afrontar todas las fuerzas que venimos defendiendo, bajo distintos nombres, la apertura de un nuevo ciclo político y social en el que el pueblo, la ciudadanía, la mayoría social trabajadora, sean los protagonistas frente a quienes hasta ahora han sido las elites dominantes.
Es el momento de hacer frente a la propuesta del sistema, tenemos que dar forma a una alternativa en favor de un proceso Constituyente abierto a la Ciudadanía, que plantee un nuevo marco constitucional que permita consolidar los derechos al trabajo, vivienda, educación, sanidad, etc., que reconozca el derecho a la autodeterminación de los pueblos del Estado para construir un verdadero estado Plurinacional, sin imposición de unas identidades sobre otras, que ponga fin al sistema patriarcal, y consolide una democracia real, participativa y directa.
Tenemos propuestas concretas, es necesario una nueva constitución que reconozca los derechos humanos, que consolide un sistema de justicia social, que amplíe la democracia, queremos un Estado independiente de la OTAN, que sea parte de un proceso horizontal de integración europea, social y justo como el que se está dando en América Latina y el Caribe, que acabe con el patriarcado como elemento represor sobre el que sustenta el sistema de dominio ideológico de la derecha, hace falta concretarlas, hacer falta llevarlas a las próximas elecciones generales para que sean defendidas por la mayoría social trabajadora como la mejor forma de asegurar una salida social de la crisis.

Reclamamos el control social de los sectores estratégicos de la economía
Estamos al final de una legislatura larga, difícil, nos acercamos hacia la próxima cita electoral en una situación en la que se nos pretende convencer de que la crisis ha terminado, que estamos en el buen camino de la recuperación, un sarcasmo que tenemos que desmontar, para que la propaganda del PP no engañe a nadie, los realidad es muy clara.
Se nos ofrecen las cifras de nuevos empleos como el gran logro del gobierno, pero la inmensa mayoría de los nuevos contratos son temporales y precarios. La proporción de trabajadores con contrato temporal ha aumentado notablemente durante el gobierno de Rajoy, y la duración de los mismos es cada vez menor (mientras que en 2008 era de 78 días de media, en la actualidad es de 54 días). Esto último se debe en parte a que se registra el doble de contratos de un día de duración que en 2008.
El número de contratos a tiempo parcial aumenta a ritmos vertiginosos. Hoy hay 230.100 ocupados a tiempo parcial más que hace justo 4 años, cuando había menos ocupados en total.
Además tengamos en cuenta que el sueldo de los nuevos empleos es notablemente reducido, hoy tener un sueldo no es garantía de tener las necesidades básicas cubiertas, al contrario cada vez hay más personas que sufren pobreza con un salario, a lo que tenemos que añadir que los nuevos contratos disponen de menos derechos laborales y de menor intensidad que los anteriores a 2010, debido a las reformas laborales llevadas a cabo por los gobiernos del PSOE y del PP (Zapatero abarató en 2010 el despido objetivo y Rajoy en 2012 abarató el despido improcedente).
Actualmente la única diferencia entre contratos de carácter temporal e indefinido es la cuantía de la indemnización, porque los indefinidos tienen muy poco de fijos.
Además, hay que tener en cuenta que Rajoy creó en 2012 una nueva figura contractual, la de los indefinidos los llamados "de apoyo a los emprendedores", cuyos empleados tienen un periodo de prueba de un año durante el cual el empleador los puede despedir de cualquier forma y sin ningún tipo de indemnización. Es decir, que son incluso peores que los temporales, porque éstos sí tienen una pequeña indemnización por despido, y como este gobierno tramposo asignó a esta nueva modalidad el mismo código que el de los indefinidos ordinarios, no hay forma humana de saber cuántos de estos contratos se están firmando en el total de indefinidos.
A esta realidad tendríamos que sumar que cada semana hay casi 4 millones de horas extraordinarias que no se pagan (si esas horas se trasladasen a nuevos empleos a tiempo completo hablaríamos de la generación de 100.000 puestos de trabajo) y que la brecha salarial de género sigue creciendo y es una de las más altas de la UE. A pesar de los pocos datos oficiales que se elaboran al respecto con clara intención de invisibilizar esta realidad, recientemente se ha publicado un estudio elaborado por UGT que señala que una mujer tiene que trabajar 79 días más al año que un hombre para ganar lo mismo; y tendría que cotizar 11 años y medio más que su homólogo masculino en un trabajo de similares características para cobrar la misma pensión. Además esta situación se ha agravado con el tiempo debido a las reformas laborales del PP y del PSOE que han lastrado la negociación colectiva, ya que cuanto más se individualiza la negociación salarial mayor grado de desigualdad salarial padecen las mujeres.
En definitiva los empleos que se crean son en unas condiciones mezquinas y de una calidad nunca vista, contratos temporales, a jornada parcial, con salarios reducidos, con alta inseguridad laboral, con niveles de explotación destacables, y en actividades de bajo valor añadido, que explican que el porcentaje de trabajadores pobres no deje de aumentar y haya alcanzado la cota del 12,3% (más de dos millones de personas), situando a España en el tercer puesto de toda la Unión Europea en este desdichado ranking.
Desde una realidad que se nos dirige cada vez hacia el tercer mundo laboral, por ello tenemos que ser capaces de plantear una alternativa que construya demuestre que es posible hacer las cosas de otra manera, que es posible poner los recursos del país, la economía al servicio de la creación de empleo, es lo que estamos llamando la construcción de un nuevo modelo de sociedad, más justa. Hace poco tiempo Alberto Garzón presentaba unas propuestas claras como base para construir la alternativa basada en que la riqueza del Estado debe de ser disfrutada por todos y todas de forma equilibrada y evitando grandes desigualdades.
Para ello, reclamamos el control social de los sectores estratégicos de la economía (como la banca o las empresas energéticas), la elaboración de un nuevo Estatuto de los Trabajadores que le confiriera mayor poder a los asalariados, el fomento de la economía social, la creación de una Policía fiscal para evitar que las grandes empresas y fortunas evadan impuestos, un mayor y mejor control de la redistribución de la renta por parte del sector público, etc.

Por una Cataluña obrera popular y solidaria en el marco de una República Federal Española
He dejado para el final referirme a lo que significan las elecciones del próximo día 27, de mostrar claramente la postura del PCE, y hacerlo desde el convencimiento de que estas elecciones son importantes porque deben suponer el inicio de un nuevo escenario político que permita por una parte resolver positivamente el encaje de Cataluña en un Estado Federal y por otra abrir el camino para una salida social de la crisis.
Partimos del reconocimiento de que Cataluña es una nación, nadie lo debería dudar a estas alturas y también de admitir que existe una situación no resuelta con raíces históricas que dificulta la relación de Cataluña con el resto del Estado, conflicto agravado por la política centralista del PP, y afectado por la sentencia del Tribunal Constitucional que rechazó el texto que había sido votado por el pueblo catalán, lo que ha fortalecido al movimiento independentista y que ha sido aprovechado por el Presidente Mas para ocultar el conflicto social, para ocultar su responsabilidad en el sufrimiento que producen sus medidas de recortes en millones de catalanas y catalanes, Mas desde el principio ha querido tapar con la senyera sus vergüenzas políticas y sus recortes sociales y económicos.
Denunciamos la huida hacia adelante del presidente Mas, que ha buscado en la sustitución de CiU, por una nueva fuerza política independentista la posibilidad de mantener su posición de liderazgo en el ámbito nacionalista catalán.
Por ello no se puede separar la legítima lucha por la identidad catalana, por la lucha contra una realidad que provoca la crisis generada por el capital catalán en alianza con el del resto del Estado, por eso el PSUC siempre se ha reclamado un Partido Nacional y de Clase, por eso siempre ha reclamado un catalanismo popular y solidario, porque es evidente que son las mismas luchas las de un trabajador de la SEAT de Barcelona que las un trabajador de cualquier fabrica del resto del Estado y las mismas preocupaciones las de una persona que sufre el paro o el desahucio que las de otras que sufren lo mismo en Madrid, Sevilla o Toledo.
Por ello el PCE muestra su plena identificación con la propuesta del PSUC en defensa de una Cataluña obrera popular y solidaria en el marco de una República Federal Española, y con este discurso participamos en la campaña de las elecciones catalanas en la candidatura Catalunya si que es pot porque creemos que esta amplia alianza es el mejor instrumento para encauzar los problemas de clase y de identidad que tanto Mas como Rajoy han aumentado de forma irresponsable.

Estos son, nuestros compromisos, nuestros retos, a los que vamos a dedicar lo mejor de nuestra energía el próximo año, vamos a derrotar a la derecha, vamos a ganar la batalla por una salida anticapitalista, democracia, social y federal a la crisis, para construir un futuro de justicia en la III República Federal.