.

.

viernes, 16 de mayo de 2014

Izquierda Unida propone que los servicios básicos, como el agua, la luz o el gas, sean un derecho y vuelvan a manos públicas para acabar con la pobreza

Más de tres millones de españoles no pueden afrontar la factura de los suministros básicos como el agua, la luz o el gas. Y más de cuatro millones de personas no pudieron este invierno calentar sus hogares como corresponde. En Málaga 21.500 personas pidieron ayuda a Cruz Roja para afrontar los pagos de estos suministros básicos. Este panorama social presentó en mañana de ayer jueves la concejala de Izquierda Unida, Ana García Sempere, durante la presentación del encuentro sobre suministros básicos.
Izquierda Unida reunió a distintos colectivos, asociaciones y agentes sociales en la plaza de Félix Saénz de la ciudad de Málaga para hablar de mecanismos que garanticen los suministros básicos a la población que lo necesite. “Cuando hablamos de suministros básicos nos referimos a esos a los que tenemos derechos todos, como vivienda, alimentación, agua y energía”.
Sempere recordó que aunque son competencias de los estados, la Unión Europea dicta las políticas que cada uno debe aplicar, como ha ocurrido con la privatización de las empresas eléctricas. “Hoy por hoy vemos cómo la Troika recomienda, en algunos casos incluso obliga a países como Portugal o Grecia, privatizar el agua como receta para reducir el déficit y “salir” de la crisis. Esto ha tenido a unas consecuencias gravísimas, para millones de personas que sufren la pobreza energética en Europa” y por supuesto no ha servido para “salir” de su crisis-estafa.
Izquierda Unida aboga por la intervención pública del sector eléctrico, que vuelva a ser público y democratizarlo para garantizar este derecho a la ciudadanía, así como el derecho al suministro de agua como recoge la ONU.
Sobre este último elemento, Luis Babiano, gerente de la Asociación Española de Operadores Públicos de Abastecimiento y Saneamiento (AEOPAS), ha señalado que en los países de centroeuropeos se está remunicipalizando el servicio. “En su día vendieron estas empresas y han demostrado que cuando se privatiza el agua se excluye a determinados sectores de la población de su uso, es decir crean un problema de accesibilidad”.
Desde 2010, el agua es un derecho humano y los países de la periferia europea, como España, viven un proceso de privatización de este recurso. “Mientras que en el mundo la privatización del agua es un 10% y en Europa un 30%, en países como el nuestro tenemos un 53% privatizado. No por eficiencia o eficacia, sino porque a estos ayuntamientos se les permite usar el dinero de la privatización para enjugar sus cuentas. Desde AEOPA pensamos que esta burbuja hídrica hay que pincharla, no se puede destinar la privatización para enjuagar sus cuentas o hacer rotondas. Y hay que tener un regulador que cumpla dos funciones, supervisar el sector que se dé un servicio eficiente, y supervisar el servicio para que no haya exclusión social. Que para la gente que no puede pagar la factura, a través de los mecanismos sociales para poder pagarlo”.
Por su parte, Alvaro Carreño, miembro de la dirección provincial de IULV-CA y especializado en consumo, ha recordado que en los últimos diez años, los ciudadanos han soportado una subida del 90 por ciento en la factura de la luz a consecuencia del proceso de privatización del sector. “De un libre mercado que nos prometían con libre competencia y bajadas porque habría muchas empresas que nos iban a ofrecer precios más baratos, lo que estamos viendo es que no tienen todos los consumidores garantizados el suministro eléctrico y estamos cada vez pagando más por este derecho”.

Izquierda Unida defiende el carácter social de estos suministros y por lo tanto deben estar bajo la custodia de los estados. “Tenemos que luchar por garantizar el derecho a la electricidad, y el Estado tiene que tener un músculo. Con los ingresos que se producen en el sector eléctrico hoy tenemos grandes dividendos repartidos entre distintas empresas energéticas. Esto podría destinarse a sufragar todos los servicios públicos y garantizarlos a los ciudadanos de la Unión Europea”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario