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martes, 30 de enero de 2024

Los retos del PCE para 2024


Amanda Meyer Hidalgo y Ernesto Alba

Es imprescindible comenzar analizando el momento político en el que nos toca intervenir como Partido, un momento político en el que destaca el auge de las organizaciones y discursos antidemocráticos, que incluso en la vieja Europa y en países de América del Sur, se convierten en gobiernos con un ideario que ataca a las mayorías sociales.
El neoliberalismo ha mutado a neoliberalismo reaccionario: todo es objeto de comercio y las corporaciones económicas suplantan la soberanía de los pueblos
Todas esas organizaciones, discursos y prácticas políticas, también las derechas en nuestro país, tienen lazos comunes: el desprecio por lo público porque no creen en la igualdad; el desprecio por la democracia, como sistema de gobierno del pueblo, porque se deben a intereses oligárquicos; el desprecio a los derechos de las mujeres y de las personas LGTBI, porque son profundamente patriarcales, y la apuesta por una construcción cultural de una supuesta libertad que legitima postulados golpistas para movilizar y atacar de manera violenta y asegurarse el poder del capital, así como el político, económico y mediático. Estamos viendo como el neoliberalismo ha modulado hacia un neoliberalismo reaccionario, donde la brecha de la desigualdad aumenta, todo lo necesario para la vida en el planeta es objeto de comercio, las corporaciones económicas suplantan la soberanía de los pueblos, las mujeres son el contingente del trabajo de cuidados y la guerra y sus patrocinadores orillan los exiguos espacios democráticos internacionales.
El 23 de julio, fuera de guión, conseguimos impedir un gobierno de la derecha y la extrema derecha en España, gracias a una coalición electoral en Sumar, formando parte minoritaria con el PSOE, hoy volvemos a formar parte de un gobierno de coalición que debe servir para seguir ampliando derechos.
Pero formar parte del gobierno no es suficiente para hacer frente a la tarea de disputa contra el bloque antidemocrático.
El año 2024, debe servir para afrontar los retos que permitan que el Partido, en alianza, contribuya a fortalecer al bloque democrático capaz de disputar con las fuerzas antidemocráticas, que quieren acabar con todo.

El PCE, Partido levadura

Ante el proceso de reconfiguración de la izquierda en nuestro país y los debates en torno a la necesidad de construir alianzas que vayan más allá de lo electoral, el PCE debe apostar por actualizar su política estratégica de alianzas, siempre construyendo y organizando frentes amplios de trabajo.
Trabajaremos para que Sumar sea el frente amplio en el que organizaciones políticas, movimientos y personas colaboren en la alternativa política al neoliberalismo reaccionario, así como en el proceso de disputa contra la derecha y la extrema derecha. Necesitamos un espacio político democrático que sirva para fortalecer el bloque democrático y refuerce las alianzas. Nuestro papel histórico es claro, tejer contrapoder popular, mantener el hilo rojo y proyectarlo hacia el futuro. No hay hueco para el desánimo, tampoco para anteponer los intereses particulares, ya sean partidarios o personales a los intereses de la clase trabajadora.
Por ello, necesitamos un partido que desde su capital histórico, político y humano sea el sostén para dar estabilidad en los procesos políticos. El PCE necesita organizar a toda su militancia desde la cohesión y que se posicione en todos los espacios políticos y sociales estratégicos para que, como la levadura, crezcan y avancen. Necesitamos un partido que huya de la liturgia y se convierta en levadura. Un partido útil y organizado que intervenga desde el impulso que se gana solventando contradicciones.
Para ello, el plan estratégico que se está elaborando por parte de la dirección central es fundamental para el fortalecimiento que necesitamos.

Asamblea extraordinaria de IU

La asamblea extraordinaria de IU es una oportunidad para que Izquierda Unida dé un paso hacia adelante como Movimiento Político, Social y Cultural.
La asamblea extraordinaria de IU tendrá que abordar qué debe ser Izquierda Unida en un momento de reconfiguración de las izquierdas en nuestro país
Debe ser una asamblea con la máxima participación y que aborde qué debe ser Izquierda Unida en los próximos años, en un momento en el que hay abierto un proceso de reconfiguración de las izquierdas en nuestro país. Y en la que el Partido va a implicarse para garantizar su éxito. La asamblea no puede ser de trámite.
Necesitamos un proceso profundo, pero compatible con los retos de país, haciendo posible la máxima participación con nuestra acción política.
Un debate amplísimo, que llegue hasta la última asamblea territorial, contando con simpatizantes y entorno.
Una convocatoria abierta para el debate y la propuesta política, con un llamamiento social desde cada pueblo y ciudad.
Una asamblea de salto hacia adelante, en el que acentuemos Movimiento Político Social para vincular a personas de manera permanente (afiliación o simpatizantes) o por causas (activistas), en el que las redes sean las herramientas para la intervención social y las reuniones sean abiertas y para la acción política.
En la que elaboremos una propuesta de país, que haga frente a los problemas de época que sufrimos: la cuestión democrática, las condiciones de vida (pan, trabajo, techo, dignidad), la crisis ecosocial (agua, pobreza energética), la paz…
Una asamblea de fortalecimiento organizativo y de impulso a la organicidad, con una práctica política interna compatible con la vida, que no penalice a las mujeres, que sea abierta y flexible en su funcionamiento.
Una asamblea de elección de direcciones representativas, plurales y capaces de articular unidad de acción. Donde, evidentemente, tendremos que elegir a nuestros máximos responsables.

Procesos electorales 2024: Galicia, Euskadi, elecciones europeas

Iniciamos un ciclo de elecciones en 2024 que suponen la segunda vuelta de las generales de 2023, en unas comunidades autónomas copadas por gobiernos del PP o de PP y VOX donde, además de aplicar una receta cultural antidemocrática contra los derechos de las mujeres y las personas LGTBI, gobiernan contra la mayoría social, ahondando en las brechas de la desigualdad y dinamitando unos debilitados Servicios Públicos (educación, sanidad, servicios sociales). Ganar las comunidades autónomas de un Estado como el español es de vital importancia.
En las elecciones vascas y gallegas es evidente que debemos hacer lo posible por llegar a acuerdos electorales con Sumar, con Podemos, y aquellas organizaciones que compartan nuestro ideario. No existe una sola razón de peso que justifique la fractura en el proceso de acumulación de fuerzas, y el Partido siempre defenderá alianzas electorales en igualdad de condiciones.
Las europeas tienen una importancia radical, en un contexto de máxima debilidad de la izquierda europea, con divisiones, escisiones y disputas personalistas, en un momento de consolidación de la derecha europea, con gran sumisión a EEUU y con una derecha extrema dispuesta a llevarnos a los tiempos oscuros del fascismo.
1.- Debemos trabajar por una coalición electoral de las organizaciones que nos coaligamos en las generales de 2023, incluida Podemos.
2.- Debemos participar de un programa electoral impugnatorio con la deriva neoliberal y atlantista europea.
3.- Debemos garantizar la referencialidad en el Grupo de la Izquierda Europea y el PIE.
4.- Y debemos garantizar que en los puestos de salida de la candidatura tengamos a camaradas que representen la propuesta internacional del PCE. Un 2024 de construcción de alianzas más allá de lo institucional, para fortalecer organización social y movilización, en el que avancemos en la consolidación de un espacio de colaboración y encuentro de las izquierdas, y que seamos capaces de aunar el mayor esfuerzo para hacer del PCE una herramienta útil en el combate por la vida y contra la barbarie. Por un 2024 en el que encendamos la chispa de la movilización. A la tarea.

LA CONSTRUCCIÓN DEL FRENTE AMPLIO

Trabajaremos para que Sumar sea el frente amplio en el que organizaciones políticas, movimientos y personas colaboren en la alternativa política al neoliberalismo reaccionario
La propuesta de frente amplio que hoy defendemos no es nueva, conecta con la mejor tradición de la izquierda transformadora, porque nunca se consiguió avances en derechos, ni defensa de los conquistados, sin organización popular y movilización social. Desde el Frente Popular, las platajuntas, Izquierda Unida, la PAH… La búsqueda de espacios amplios, unitarios y con protagonismo popular es el hilo conductor de la propuesta política comunista.
Fue imposible consolidar Unidas Podemos como espacio político más allá de una alianza electoral. Las distintas fuerzas políticas que participábamos en aquel espacio de convergencia electoral, y que sostuvimos el primer gobierno de coalición progresista, desde la República, no logramos garantizar un proceso de constitución de un espacio radicalmente democrático. Carecíamos, pese a estar en el gobierno, de unos órganos de coordinación conjuntos.
Desde esa experiencia, sabemos que la construcción de Sumar pasa por garantizar la máxima participación democrática de sus componentes. Actualmente, el proceso de consolidación de espacios democráticos de coordinación en Sumar, o no existen o van lentos. Desde el PCE, tenemos propuesta y queremos discutirla en igualdad de condiciones que otras organizaciones. Es importante que las organizaciones políticas que compartimos, o hemos compartido, coalición electoral en Sumar, pasemos del conflicto y la competición, a la colaboración, y eso pasa por crear espacios heterogéneos en su composición partidista, plurales en su caracterización ideológica y diversos en la composición de sus actores (partidos, movimientos y personas).

Las decisiones en Sumar deben ser compartidas, los órganos de coordinación vivos y dinámicos, descentralización territorial y una hoja de ruta que garantice que cada persona que participa en Sumar, decida. Por otro lado, el capital político que estamos construyendo entre todas las organizaciones es mancomunado, en este sentido, es importante que nadie pueda disponer de la marca Sumar para confrontar contra el resto de organizaciones. Nadie puede decidir los pasos de Sumar sin acuerdo de sus partes. Sólo así garantizaremos que Sumar sea algo más que la última coalición electoral de las generales.
Nuestra apuesta como PCE debe ser avanzar hacia un Frente Amplio que defienda una alternativa de país cuya propuesta política pase por la emancipación de la clase trabajadora, políticas públicas ecosocialistas que hagan frente a la crisis eco social, un feminismo de Estado que termine con la crisis de los cuidados y las violencias machistas y por unas políticas de paz en defensa de un orden democrático mundial que anteponga la vida a los intereses imperialistas y de la guerra. En definitiva, los hilos rojo, verde, morado y blanco.
(*) Amanda Meyer, responsable del Área de Convergencia e Institucional del Comité Central del PCE / Ernesto Alba, secretario general del Partido Comunista de Andalucía
https://mundoobrero.es/2024/01/28/los-retos-del-pce-para-2024/?fbclid=IwAR03i02PuYkfG4W9C-PjOav6racpKa6KIZZ8OwXsTNMlNvhZdrwlq6BYuoE

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