Antonia Morillas González, tomó posesión de su cargo como nueva directora general del Instituto de las Mujeres, el pasado día 26 de mayo, en un acto presidido por la Ministra de Igualdad, Irene Montero.
En el referido acto, Morillas, ha señalado que el feminismo, en los últimos años, ha puesto sobre la mesa una nueva agenda política para la igualdad, cuyo principal desafío es garantizar que “todas las personas, también las mujeres, tengamos los recursos necesarios para satisfacer las necesidades vitales más básicas”.
Asimismo, ha hecho hincapié en la necesidad de fortalecer un sistema público que aborde la ingente tarea de la reorganización social de los cuidados y de poner la sostenibilidad de la vida en el centro, lo que implica atender de manera prioritaria a las condiciones materiales de vida de las mujeres, redistribuyendo los tiempos, los trabajos y la riqueza, “porque sin esa redistribución -ha dicho- no habrá igualdad posible”.
La directora nacional del Instituto de las Mujeres ha marcado las tres prioridades sobre las que va a orientar su gestión al frente del mismo:
-Como primera va a abordar la reforma en profundidad de la Ley 2/2020, de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo, para eliminar “los tutelajes patriarcales” y garantizar la accesibilidad y equidad de la interrupción voluntaria del embarazo en el Sistema Nacional de Salud.
-La construcción de una alianza feminista que ponga fin a todas las violencias que se ejercen contra las mujeres
- Avanzar en los derechos de conciliación corresponsable, combatiendo la feminización de la pobreza y priorizando, en este ámbito, el territorio rural y la España vaciada.
Antonia Morillas ha puesto también el foco en la necesidad de reconocer como violencia contra las mujeres la explotación reproductiva y la violencia obstétrica. Otra de las dos cuestiones sobre los que trabajará desde el Instituto de las Mujeres es la impunidad de la gestación subrogada, que aun estando prohibida en España, es tolerada, así como la impunidad ante la prostitución que ha de ser abolida.
La camarada Toni Morillas, es natural de la jienense localidad de Torredonjimeno (1982) y vecina de Málaga desde el año 2000, siendo licenciada en Comunicación Audiovisual. Es militante y dirigente de Izquierda Unida y del Partido Comunista de Andalucía (PCA), fue concejal del Ayuntamiento de Málaga en la legislatura de 2011 a 2015, en la que fue además diputada provincial. En la actualidad la responsable de la Red de Activistas Feministas de IU en Andalucía y responsable de Formación Feminista del PCA.
Además, una vez que dejó hace seis años la acción como concejal, ha sido subdirectora de una entidad social especializada en el diseño, desarrollo y evaluación de procesos de innovación participativa en el ámbito público, orientados a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y a la inclusión democrática y empoderamiento de los sectores sociales más vulnerables.
Es de resaltar que puso en marcha y dirigió en la Diputación Provincial de Málaga la primera experiencia en España en un organismo supramunicipal de promoción de los presupuestos participativos como instrumento de participación directa de la ciudadanía en la toma de decisiones del ámbito público municipal, constituyendo una referencia en este campo.
Desde el PCE, su partido, le deseamos mucho ánimo y todo nuestro apoyo para que esta nueva etapa de lucha feminista desde el Gobierno se culmine con éxito en favor de la mayoría.
¡Que viva la lucha de las mujeres!
En el referido acto, Morillas, ha señalado que el feminismo, en los últimos años, ha puesto sobre la mesa una nueva agenda política para la igualdad, cuyo principal desafío es garantizar que “todas las personas, también las mujeres, tengamos los recursos necesarios para satisfacer las necesidades vitales más básicas”.
Asimismo, ha hecho hincapié en la necesidad de fortalecer un sistema público que aborde la ingente tarea de la reorganización social de los cuidados y de poner la sostenibilidad de la vida en el centro, lo que implica atender de manera prioritaria a las condiciones materiales de vida de las mujeres, redistribuyendo los tiempos, los trabajos y la riqueza, “porque sin esa redistribución -ha dicho- no habrá igualdad posible”.
La directora nacional del Instituto de las Mujeres ha marcado las tres prioridades sobre las que va a orientar su gestión al frente del mismo:
-Como primera va a abordar la reforma en profundidad de la Ley 2/2020, de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo, para eliminar “los tutelajes patriarcales” y garantizar la accesibilidad y equidad de la interrupción voluntaria del embarazo en el Sistema Nacional de Salud.
-La construcción de una alianza feminista que ponga fin a todas las violencias que se ejercen contra las mujeres
- Avanzar en los derechos de conciliación corresponsable, combatiendo la feminización de la pobreza y priorizando, en este ámbito, el territorio rural y la España vaciada.
Antonia Morillas ha puesto también el foco en la necesidad de reconocer como violencia contra las mujeres la explotación reproductiva y la violencia obstétrica. Otra de las dos cuestiones sobre los que trabajará desde el Instituto de las Mujeres es la impunidad de la gestación subrogada, que aun estando prohibida en España, es tolerada, así como la impunidad ante la prostitución que ha de ser abolida.
La camarada Toni Morillas, es natural de la jienense localidad de Torredonjimeno (1982) y vecina de Málaga desde el año 2000, siendo licenciada en Comunicación Audiovisual. Es militante y dirigente de Izquierda Unida y del Partido Comunista de Andalucía (PCA), fue concejal del Ayuntamiento de Málaga en la legislatura de 2011 a 2015, en la que fue además diputada provincial. En la actualidad la responsable de la Red de Activistas Feministas de IU en Andalucía y responsable de Formación Feminista del PCA.
Además, una vez que dejó hace seis años la acción como concejal, ha sido subdirectora de una entidad social especializada en el diseño, desarrollo y evaluación de procesos de innovación participativa en el ámbito público, orientados a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y a la inclusión democrática y empoderamiento de los sectores sociales más vulnerables.
Es de resaltar que puso en marcha y dirigió en la Diputación Provincial de Málaga la primera experiencia en España en un organismo supramunicipal de promoción de los presupuestos participativos como instrumento de participación directa de la ciudadanía en la toma de decisiones del ámbito público municipal, constituyendo una referencia en este campo.
Desde el PCE, su partido, le deseamos mucho ánimo y todo nuestro apoyo para que esta nueva etapa de lucha feminista desde el Gobierno se culmine con éxito en favor de la mayoría.
¡Que viva la lucha de las mujeres!
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