La candidata de Sumar lo tiene claro, quiere medidas concretas que mejoren la vida de la gente común, es decir de la mayoría social trabajadora que sostiene este país y que ha visto mermadas sus capacidades económicas debido a la carestía de la vida que impone la lógica especuladora del capital.
Una de esas cuestiones que asfixia a la clase trabajadora es el alza del euríbor que se traduce en la subida de las hipotecas. Para hacerle frente, Yolanda Díaz ha propuesto dar 1.000 euros como «compensación inmediata» a las familias afectadas.
La ministra de Trabajo y Economía Social ha señalado que para este bono se ha establecido un límite de diez años de antigüedad y un máximo de capital prestado de 250.000 euros. El fondo tendría un coste fiscal máximo de 1.000 millones de euros. «Le ingresaremos un porcentaje que ha sido conservador de 1.000 euros de compensación a todas las personas con estas características», ha añadido la líder de Sumar.
La también vicepresidenta segunda ha explicado que este bono se pagaría con el impuesto a la banca que se ha comenzado a aplicar este año a las grandes entidades, gracias a la acción de gobierno de Unidas Podemos, que ha conseguido sacar adelante este impuesto que grabe los indecentes beneficios de las entidades bancarias.
Además, Yolanda Díaz ha advertido, en este sentido, de que con una subida de la cuota hipotecaria de 300 euros y un salario de 1.500 euros mensuales «es imposible vivir». «Es urgente hacer esta propuesta por el malestar social existe y es real», por la «brecha brutal» que ha provocado la inflación entre los gastos de las familias (como la vivienda y la cesta de la compra) y los salarios, en un contexto de «beneficios abusivos de muchas empresas».
También ha aprovechado para afirmar que el Código de Buenas Prácticas hipotecario, firmado entre el Gobierno y las patronales bancarias en noviembre de 2022, «no está funcionando», ya que solo habría registrado 10.000 solicitudes, frente al impacto positivo sobre un millón de hogares que cifraba el Ministerio de Asuntos Económicos.
Díaz se ha mostrado partidaria de actuar «bajo el diálogo», pero ha señalado la «urgencia» de actuar sobre las cuotas hipotecarias. En este sentido, se ha referido a la petición de la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, de pedir que se remuneren los depósitos. «Está muy bien, pero se queda muy corto», ha indicado.
Una de esas cuestiones que asfixia a la clase trabajadora es el alza del euríbor que se traduce en la subida de las hipotecas. Para hacerle frente, Yolanda Díaz ha propuesto dar 1.000 euros como «compensación inmediata» a las familias afectadas.
La ministra de Trabajo y Economía Social ha señalado que para este bono se ha establecido un límite de diez años de antigüedad y un máximo de capital prestado de 250.000 euros. El fondo tendría un coste fiscal máximo de 1.000 millones de euros. «Le ingresaremos un porcentaje que ha sido conservador de 1.000 euros de compensación a todas las personas con estas características», ha añadido la líder de Sumar.
La también vicepresidenta segunda ha explicado que este bono se pagaría con el impuesto a la banca que se ha comenzado a aplicar este año a las grandes entidades, gracias a la acción de gobierno de Unidas Podemos, que ha conseguido sacar adelante este impuesto que grabe los indecentes beneficios de las entidades bancarias.
Además, Yolanda Díaz ha advertido, en este sentido, de que con una subida de la cuota hipotecaria de 300 euros y un salario de 1.500 euros mensuales «es imposible vivir». «Es urgente hacer esta propuesta por el malestar social existe y es real», por la «brecha brutal» que ha provocado la inflación entre los gastos de las familias (como la vivienda y la cesta de la compra) y los salarios, en un contexto de «beneficios abusivos de muchas empresas».
También ha aprovechado para afirmar que el Código de Buenas Prácticas hipotecario, firmado entre el Gobierno y las patronales bancarias en noviembre de 2022, «no está funcionando», ya que solo habría registrado 10.000 solicitudes, frente al impacto positivo sobre un millón de hogares que cifraba el Ministerio de Asuntos Económicos.
Díaz se ha mostrado partidaria de actuar «bajo el diálogo», pero ha señalado la «urgencia» de actuar sobre las cuotas hipotecarias. En este sentido, se ha referido a la petición de la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, de pedir que se remuneren los depósitos. «Está muy bien, pero se queda muy corto», ha indicado.
Propone seguir subiendo el SMI
En estos términos también se ha referido a la propuesta que realizó ayer el presidente del Gobierno y candidato del PSOE a las elecciones del 23 de julio, Pedro Sánchez, de subir el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta un 60% del salario medio. «Yo he subido el SMI hasta alcanzar el 60% del salario medio, tal y como recomienda la Carta Social Europea», ha defendido Yolanda Díaz, por lo que considera que esta propuesta de Sánchez «se queda corta».
En cambio, se ha comprometido a reducir la brecha de 25 puntos básicos con respecto a la media europea salarial, de tal manera que seguiría subiendo el SMI. «No nos vamos a quedar en los 1.080 euros. No voy a emprender una negociación en tiempo de descuento de las elecciones, pero si volvemos a gobernar, se va a volver a subir el SMI» para aprovechar su «efecto tractor».
En estos términos también se ha referido a la propuesta que realizó ayer el presidente del Gobierno y candidato del PSOE a las elecciones del 23 de julio, Pedro Sánchez, de subir el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta un 60% del salario medio. «Yo he subido el SMI hasta alcanzar el 60% del salario medio, tal y como recomienda la Carta Social Europea», ha defendido Yolanda Díaz, por lo que considera que esta propuesta de Sánchez «se queda corta».
En cambio, se ha comprometido a reducir la brecha de 25 puntos básicos con respecto a la media europea salarial, de tal manera que seguiría subiendo el SMI. «No nos vamos a quedar en los 1.080 euros. No voy a emprender una negociación en tiempo de descuento de las elecciones, pero si volvemos a gobernar, se va a volver a subir el SMI» para aprovechar su «efecto tractor».