Comisión Colegiada de
Izquierda Unida
Desde Izquierda Unida
entendimos que las elecciones generales del 28 de abril confirmaron
una oportunidad histórica para poner en marcha políticas que
mejorasen las condiciones de vida de las familias trabajadoras de
nuestro país. Apostamos por profundizar la línea de trabajo
mantenida durante la moción de censura contra Mariano Rajoy y el
posterior acuerdo presupuestario con el PSOE: la búsqueda de
acuerdos entre las distintas sensibilidades progresistas que cierren
el paso a las derechas radicalizadas y demuestren, después de una
década de pérdida de derechos, que se puede gobernar al servicio de
la mayoría social. Con este objetivo aprobamos en la Coordinadora
Federal celebrada el pasado sábado la propuesta –respaldada
por la militancia mediante un referéndum– de apoyar la
investidura de Pedro Sánchez y un gobierno de coalición siempre y
cuando se alcanzara un acuerdo programático que incluyera las
garantías necesarias para el cumplimiento del mismo.
Muy a nuestro pesar, ayer
asistimos a una investidura fallida que, de momento, cierra la
posibilidad de un gobierno de izquierdas y abre el escenario de una
repetición electoral que solo beneficiaría a las derechas y, por
consiguiente, a las élites económicas de nuestro país. Todavía
estamos a tiempo de evitar lo que a todas luces es un riesgo
innecesario e inasumible por una ciudadanía que no necesita más
crispación, sino propuestas.
Por ello, exigimos al
PSOE que no incumpla su principal promesa electoral y apueste
decididamente por un gobierno de izquierdas, haciendo caso al
clamor popular que reclama un acuerdo de izquierdas en lugar de ceder
antes las presiones de los poderes económicos que están trabajando
sin descanso para evitar dicho gobierno. Lamentablemente, en el PSOE
es toda una costumbre el decir una cosa en campaña electoral y
acabar haciendo la contraria tras las elecciones, traicionando la
esperanza de la ciudadanía progresista. Si finalmente acaba
provocando una repetición electoral única y exclusivamente por
intereses partidistas, Pedro Sánchez pondrá en riesgo la
posibilidad de recuperar los derechos perdidos durante la última
década y brindará una segunda oportunidad a las derechas para
hacer en el conjunto del país lo que ya están haciendo en algunas
Comunidades.
De la misma manera,
creemos que el Grupo Parlamentario de Unidas Podemos debe también
exigir un acuerdo en torno a las bases programáticas establecidas
en el Acuerdo de los Presupuestos Generales del Estado de 2019,
aun en el supuesto de que no existiera acuerdo para constituir un
gobierno de coalición con el PSOE, con el fin de evitar una nueva
repetición electoral. En Izquierda Unida entendemos que es
precisamente en los momentos más convulsos cuando más firmemente
debemos mantener como única guía la defensa de los intereses de las
familias trabajadoras. Frente al oportunismo de los partidos que
defienden los intereses de una minoría privilegiada, apostamos por
una izquierda firme, coherente y solvente a la hora de defender a la
clase trabajadora y los sectores populares.
Por todo ello, desde
Izquierda Unida seguimos apostando por el diálogo, la negociación y
el acuerdo en torno a las propuestas programáticas que desde Unidas
Podemos venimos trabajando con colectivos en lucha, movimientos
sociales y sindicatos. Todavía estamos a tiempo de poner la
cordura que se le exige a la izquierda especialmente en contextos
convulsos de crisis y amenaza reaccionaria. En este empeño seguimos
invirtiendo nuestros recursos, nuestras energías y nuestras
esperanzas: la ciudadanía progresista no nos perdonaría lo
contrario.
26 de julio 2019
COMISIÓN COLEGIADA DE
IZQUIERDA UNIDA